Servicio Prevención del Riesgo Cardiovascular

La enfermedad cardiovascular es una de las que mayor impacto tiene en materia de salud pública y sigue siendo la principal causa de mortalidad en nuestro país. Las muertes prematuras, la discapacidad, la pérdida de productividad y los costes sanitarios repercuten negativamente en las familias y en la sociedad.

Esta mortalidad es potencialmente evitable, ya que las enfermedades del aparato circulatorio comparten diferentes factores de riesgo, algunos de los cuales son modificables. Impulsar medidas de promoción de la salud facilita la introducción de cambios en los estilos de vida para la prevención de la enfermedad cardiovascular y para minimizar sus complicaciones.

SERVICIO DE SALUD CARDIOVASCULAR EN CASTILLO.

Castillo ofrece durante los meses de marzo y abril un servicio destinado a la prevención del riesgo cardiovascular (RCV). Bajo el lema “Escucha tu Corazón”, esta acción se desarrolla para concienciar sobre las enfermedades cardiovasculares y de la trascendencia de la intervención sobre los factores de riesgo, subrayando la importancia de establecer unos hábitos de vida más saludables. La población diana como tal podría ser cualquier usuario que presente al menos un factor de RCV: hipertensión, diabetes, dislipemia, tabaquismo, obesidad, estrés…

Esta actividad pretende asesorar e implicar a los pacientes en el control de su RCV, así como mejorar su conocimiento sobre los estilos de vida saludables y las medidas higiénico-dietéticas relacionadas con la disminución del riesgo.

Con este tipo de acciones, Castillo quiere trasmitir a sus clientes que ellos son partícipes de su propia salud. Apostamos así por la información para el autocuidado, ya que es mucho más sencillo y rentable mantenerse sano que curarse después de enfermar.

MEDIDAS QUE PUEDEN AYUDAR A PREVENIR LAS ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES.

En la mayoría de ocasiones los accidentes cardiovasculares no vienen precedidos de sintomatología, por ello resulta tan importante tener unos hábitos saludables, tales como:

  • Mantener un peso adecuado, controlando sobre todo la acumulación de grasa en la zona abdominal.
  • Realizar ejercicio físico regularmente, de forma controlada y adaptada a las circunstancias personales, y supervisada por un profesional sanitario.
  • Cuidar la alimentación, limitando el consumo de grasas y aumentando la ingesta de frutas, verduras, pescado y aceite de oliva. Asimismo, reducir la sal en las comidas.
  • Limitar o abandonar el consumo de alcohol.
  • Abandonar el consumo de tabaco.
  • Gestionar positivamente el estrés y la ansiedad

Asimismo, hay que cuidar determinados problemas de salud que pueden aumentar el riesgo de patología cardiovascular:

  • Hipercolesterolemia. Los niveles de colesterol elevados se relacionan con aterosclerosis coronaria, por consiguiente, deben controlarse y corregirse
  • Hipertensión arterial. La hipertensión arterial se asocia con una mayor frecuencia de enfermedad coronaria. Por ello, es vital importancia controlar la presión arterial y mantenerla en cifras normales. Las consecuencias de la hipertensión no tratada son variadas y de diversa gravedad
  • Obesidad. El sobrepeso se traduce en un exceso de trabajo cardíaco, o lo que es lo mismo, en un aumento de las demandas miocárdicas de oxígeno. Los pacientes obesos deben disminuir el peso corporal con una dieta hipocalórica equilibrada y un programa de actividad física, controlados ambos por un profesional sanitario.
  • Diabetes mellitus. Es un factor de riesgo y debe controlarse. Realizar una evaluación frecuente de glucemia en sangre es de vital importancia

Castillo enfatizará en la importancia de la adopción de medidas de conducta sobre estilos de vida que disminuyan el riesgo de sufrir un evento cardiovascular, y recalcará la importancia de fomentar la colaboración del paciente para intervenir más eficazmente en los factores de riesgo.

Se ha de ser consciente de que en el siglo XXI la salud ya no sólo se concibe como la ausencia de enfermedad, sino que abarca el bienestar físico y psíquico y la prevención de enfermedades que pueden ser evitables cambiando nuestros hábitos de vida, los individuales y colectivos. En Castillo, durante los meses de marzo y abril, tenemos como prioridad informar y aconsejar sobre la salud cardiovascular. Con ello pretendemos producir un impacto real en la reducción del riesgo de las enfermedades cardíacas en la comunidad a la que atendemos.

Durante los meses de Marzo y Abril, Castillo se convierte en un lugar idóneo para obtener consejos prácticos e información sobre tu salud cardiovascular. La próxima vez que nos visites, ¿por qué no hablamos sobre los pasos que puedes dar para asegurarte un corazón saludable modificando ciertos hábitos? Una breve conversación podría suponer un cambio que logre reducir tu riesgo de sufrir complicaciones a largo plazo.

¡Te esperamos!