Gracias a la evolución del concepto tradicional de salud, en la actualidad entendemos que además de prevenir y curar las enfermedades, se ha de buscar el bienestar físico y psíquico del paciente, y no cabe duda de que la celulitis puede repercutir en ambos. Por este motivo, hoy en día se entiende la celulitis como un problema de salud y de estética, que debe abordarse de forma multidisciplinar.
La celulitis se define como un trastorno local del metabolismo del tejido subcutáneo que provoca una modificación de la figura y una alteración de la topografía de la piel, dándole una apariencia característica de “piel de naranja”. Aparece sobre todo en mujeres en la región pélvica, miembros inferiores y región abdominal. La celulitis sigue siendo una causa común de preocupación estética en la mayoría de las mujeres.
Causas de la celulitis
La etiología de la celulitis se considera multifactorial con intervención de los siguientes factores:
Factores hereditarios
La celulitis es casi exclusiva de mujeres (prevalencia del 95%), mientras que la aparición en el hombre es escasa (solo alcanza el 5%). Las mujeres de raza blanca tienden más a tener celulitis que las asiáticas o las mujeres de raza negra.
Factores hormonales
Los estrógenos femeninos desempeñan un papel predisponente o agravante de la celulitis y son especialmente importantes durante la adolescencia. Los estrógenos estimulan la proliferación de los fibroblastos e incrementan la actividad de los adipocitos, originando la formación de nódulos celulíticos. Esto da lugar a la presencia de celulitis en la mayoría de las mujeres, a su empeoramiento por el embarazo, menopausia o a la terapia por estrógenos, y a que su inicio se produzca después de la pubertad.
Factores relacionados con el estilo de vida
La alimentación tiene una gran importancia en el desarrollo de la celulitis. La vida sedentaria y la falta de ejercicio físico también contribuyen al agravamiento de la celulitis, así como el hábito tabáquico y el abuso de alcohol, y factores psicológicos como el estrés y la ansiedad.
Abordaje de la celulitis
Al tratarse de un problema de origen multifactorial, debe abordarse desde distintos frentes, teniendo en cuenta las características propias de cada persona y el estadío en el que se encuentra esta alteración cutánea.
Prevención
El mejor tratamiento es el preventivo, controlando siempre, en la medida de lo posible, los factores influyentes. Si bien es cierto que cuando la paciente acude a tratarse la celulitis ya está presente, aun así resulta útil la prevención, porque colaborará en el resultado del tratamiento que se instaure. Se debe potenciar una forma de vida sana desde edades muy tempranas, lo que implica el cumplimiento de las siguientes recomendaciones higiénico-dietéticas:
- Evitar el sedentarismo realizando ejercicio físico adecuado a las circunstancias personales
- Evitar el consumo de alimentos refinados
- Moderar la cantidad de sal y evitar la comida precocinada por su alto contenido en aditivos y sales sódicas que promueven la retención de líquidos
- Aporte abundante de líquidos, agua o infusiones
- Evitar el tabaco, ya que perjudica la circulación sanguínea y aumenta los radicales libres
- Evitar el alcohol y controlar el consumo de café
- Evitar el estrés. Los nervios, la irritabilidad y la ansiedad son factores propicios para la aparición de celulitis
- Evitar el estreñimiento consumiendo alimentos que favorezcan el tránsito intestinal.
- Evitar prendas ajustadas y calzado incorrecto
- Evitar el exceso de calor, las exposiciones prolongadas al sol, calefacciones y locales cerrados con exceso de temperatura
- Corregir la postura corporal, ya que largos periodos de tiempo en la misma posición favorece la estasis venosa
- Dormir al menos 8 horas
- De forma general, una dieta saludable debe ser nutricionalmente muy equilibrada. Para combatir la celulitis, se recomienda incluir en la dieta alimentos que favorezcan la diuresis, prevengan el estreñimiento y la obesidad, y mejoren los problemas de circulación.
Tratamiento específico
Al ser un problema multifactorial, se deben abordar todos los factores que la causan. Basándonos en el mecanismo de formación de la celulitis, el tratamiento debe incluir una o más de los siguientes aspectos:
- Activar la microcirculación periférica.
- Disminuir la permeabilidad capilar
- Aumentar el metabolismo de las células adiposas
- Facilitar el drenaje linfático.
Los tratamientos tópicos son los más utilizados. Se pueden encontrar formulaciones tipo emulsión, gel, stick, aceite, parches transdérmicos y jabones. Los principios activos que se incluyen en estas preparaciones suelen proceder de extractos vegetales con sustancias activas eficaces para tratar esta alteración. Se puede complementar con un tratamiento oral con complementos alimenticios. Los tratamientos médico-estéticos deben ser realizados siempre por profesionales.
Nuestras recomendaciones
La celulitis es un tema de consulta habitual en nuestro establecimiento. En Castillo podemos recomendarte un tratamiento adecuado e informarte sobre estilos de vida saludable que ayuden a mejorar el problema.
Aunque eliminarla por completo es casi imposible, lo que sí se puede conseguir con los métodos adecuados es mejorar de forma visible el aspecto de la piel. Lo importante es seguir los consejos básicos de higiene de vida, pautas de alimentación, y aplicación correcta del anticelulítico para que podamos obtener el máximo resultado. Pero sobre todo, debemos ser constantes.
Los anticelulíticos se deben aplicar durante todo el año. Lo mínimo que se aconseja son 3 o 4 meses, aunque los resultados son visibles a partir de las 2 semanas.
Siempre bajo estas premisas, estos son los productos de nuestra recomendación:
El Concentrado Esbeltez Vinosculpt de Caudalie es un aceite corporal remodelador que tonifica y alisa el abdomen, los muslos, las caderas y los glúteos para afinar y embellecer la silueta. Activa el drenaje, ayuda a eliminar el agua y las toxinas y a reducir el aspecto de piel de naranja de la celulitis.
Aceite de Abedul para la Celulitis de Weleda. Aceite Anticelulítico con doble acción reductora y reafirmante para el tratamiento natural para la piel de naranja. El Aceite de Abedul activa el metabolismo de la piel y facilita la circulación de líquidos. El uso constante mediante el masaje previene y mejora el estado de la celulitis. Además, su fórmula con Germen de Trigo, Aceite de Hueso de Albaricoque y Jojoba nutre, alisa y tonifica la piel.
Comodynes DUPLO Body Reducer Parches Reductores 2X1. Gracias a su tecnología transdérmica, ayudan a reducir las zonas con mayor tendencia a acumular grasas. No se recomienda su colocación en pechos y en zonas sensibles como interior de muslos.
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